jueves, 30 de marzo de 2017

Celia Romero: «Soy muy nueva y sé que el flamenco es una carrera de fondo de gran recorrido»

La ganadora más joven de la Lámpara de la Unión debuta hoy en el Salón de Columnas (21 horas) con el toque de Paco Cortés

Celia Romero lleva el cante en la sangre: «Vivo el flamenco las veinticuatro horas del día», asegura una artista asombrosamente precoz que ganó la Lámpara Minera con la insultante edad de 16 años en 2011 y que continúa con paso firme su carrera por el flamenco sin ninguna prisa pero sin pausa: «Actuar en la Gira del Norte es un compromiso maravilloso y tengo muchas ganas de debutar en Logroño; vengo con Paco Cortés a la guitarra y lo que puedo asegurar es que voy a dar lo mejor de mí misma en el escenario».
-¿Cómo se puede explicar que una cantaora de 16 años gane un premio tan exigente como la Lámpara Minera?
-Bueno, llevaba mucho tiempo preparándolo porque canto desde que tenía siete años. Lo preparé muy a fondo, ésa es la verdad y fue la primera persona que lo ganó siendo menor de edad.
-Pero los cantes de Levante y de las minas son extremadamente complejos...
-En el flamenco hay que estudiar, escuchar, estar muy atenta siempre a todos los detalles. Desde pequeña escuchaba y me quedaba con las cosas. Mi padre toca la guitarra y es profesor y quizás esa vertiente didáctica suya me ayudó mucho.
-Fue la primera persona menor de 18 años en ganar el premio. ¿Le dio vértigo?
-Un poco sí, fue emocionante y me ha servido de mucho en mi carrera.
-Sin embargo, ha cuidado mucho su trayectoria...
-El flamenco es una carrera de fondo muy largo. Yo tenía claras varias cosas, una de ellas es que me quería dedicar profesionalmente al cante pero que también me tenía que formar en otros aspectos. Estoy terminando el Grado de Educación Infantil y luego ya veremos.
-Este año el ciclo se ha dedicado a la mujer en el cante. ¿Se canta distinto al ser mujer?
-Como sucede en todos los ámbitos de la vida, y el flamenco es uno de ellos, la preponderancia del hombre por encima de la mujer ha sido evidente. Pero todo eso ha cambiado radicalmente. Ha habido cantaoras extraordinarias y hay en este momento un manojo de ellas deslumbrante. Se canta distinto porque nuestra expresión es diferente. Yo nunca me fijo en un flamenco si es hombre o mujer, lo que busco es que sea capaz de trasladarme una emoción.
-Siempre menciona a ‘La Paquera’ como una de las cumbres del cante. ¿Qué es lo que más le emociona de ella?
-Era impresionante la fuerza y la personalidad tan poderosa que tenía sobre el escenario. Su empaque, su empuje, era un auténtico torrente. La verdad es que lo tenía todo.
-También admira a Carmen Linares...
-Es una cantaora soberbia, una mujer que ha hecho grandísimas cosas por el flamenco y que en su carrera ha rescatado cantes casi perdidos. El flamenco le debe mucho a una de las cantaoras más de las últimas décadas.
-¿Cómo se define?
-Es algo que me cuesta mucho hacer. Busco el cante clásico; eso sí. Luego está el público y los críticos para adjetivar y valorar lo que hago sobre el escenario.
-¿Escucha otras músicas más allá del flamenco?
-Claro, hay dos artistas que me gustan mucho: Alejandro Sanz y Manolo García.
-Ha hecho cosas con Dulce Pontes e incluso versiones de Manolo Tena... ¿Le enriquecen como flamenca?
-Desde luego, se establece un diálogo con otras músicas y eso es bueno porque te dan una visión de los diferentes registros musicales que existen.
-¿Y cómo canta? ¿aparece el acento de su flamenco?
-Quieras o no sale a relucir tu forma de concebir la música, tus tonos; hay ribetes flamencos pero no es flamenco. El cante es único.
-¿En qué artistas flamencos estudia el cante?
-Muchos, desde Antonio Mairena a Caracol y también los extremeños como Guadiana, Ramón ‘El Portugués’, La Marelu, Caíta o el Indio Gitano... Siempre se aprende de todo el mundo. Yo me considero una artista en formación y siento que es esencial la humildad y las ganas de aprender.

-Viene con Paco Cortés, un tocaor de cabecera de flamencos como Enrique Morente o Carmen Linares. ¿Esa maestría se nota?

-Es un extraordinario guitarrista con una experiencia increíble. Estar a su lado en el escenario es un verdadero seguro y me ofrece una confianza tremenda a la hora de interpretar cada uno de los cantes de mi repertorio.

Paco Cortés, uno de los grandes del toque para cantar. 
El tocaor granadino Paco Cortés es uno de los grandes de la guitarra de acompañamiento. Se presentó en los Jueves Flamencos en 2002 con Carmen Linares y ha venido después con Talegón de Córdoba (2003), Rocío Segura (2004), María Toledo (2005), Chano Lobato (2007), Luis ‘El Polaco’ (2008) y con el ‘Nene de Santa Fé’ el año pasado; además de ‘Guitarras de Graná’, con Miguel Ochando y su hermano Miguel Ángel en un inolvidable trío de guitarras. Paco Cortés nació en Granada en el año de 1957,   comenzó su carrera siendo todavía un niño, formándose a la par que trabajando en las zambras del Sacromonte granadino, barrio en el que nació bebiendo las fuentes del flamenco en el propio ámbito familiar. A los catorce años de edad comenzó a trabajar en giras internacionales, acompañando para bailar a Mario Maya. Ha grabado con Morente o Carmen Linares, dos de los principales flamencos con los que ha trabajado a lo largo de su dilatada carrera profesional. En Logroño ha dejado veladas para la memoria y se trata de uno de los guitarristas que mejor domina todas las técnicas, además de su gran sensibilidad didáctica. o Esta entrevista la he publicado en Diario La Rioja