domingo, 14 de diciembre de 2014
EL FRANQUISMO ERA ESTO
Estamos hartos de pagar impuestos para darlos a Madrid / Queremos ya la independencia, se nos acaba la paciencia / ¡Que Rajoy se joda ya!». Éste es el estribillo de un singular villancico compuesto en el colegio Carme Vedruna de Manlleu (Barcelona) para la tradicional función de los ‘Pastorets’, que celebran todos los años por Navidad. Desde las altas instancias del colegio se asegura que «la letra salió de los propios alumnos», muchachos de entre diez y once años que al parecer han asumido hasta el tuétano las reivindicaciones separatistas de Mas, Pujol y Junqueras con una naturalidad inopinada y con una fe en la religión separatista mucho más propia de fórmulas educativas totalitarias que de un país democrático como se supone que debiera de ser Cataluña. Se imaginan que los niños de Vuelo Madrid Manila, por decir un cole, salieran de clase cantando: «¡Pedro y Cuca son nuestros faros de Alejandría / gracias a ellos crecemos más cada día / El uno con su energía, la otra con su alegría!». Se lo imaginan. Seguro que aparecería Logroño hasta en las noticias de la CNN y que el señor Cintora destacaría en El Espolón un ejército de ‘cameramans’ y reporteros para dar cuenta al mundo de tamaña provocación intelectual, moral y democrática, que son ese tipo de palabras rellenas de crema pastelera que tanto gustan en las tertulias de Madrid (acabado en ‘t’). Mas pasa en la Cataluña soberanista de Mas y apenas sucede nada, una nota a pie de página, un escandalito y fin. Sin embargo, a mí todo esto de utilizar a los niños para argumentar cuestiones políticas en plan fervorín no sólo me parece una ridiculez sino una absoluta falta de decencia democrática. Durante el Franquismo se hacían cosas de este tenor, posiblemente tan zafias, pero las hacía un general espadón y autoritario, no supuestos demócratas. o Este artículo lo he publicado en Diario La Rioja