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| Esteban Pérez Abión |
¿Existirá algo no revelado para explicar su afán huidizo y su absoluta falta de comunicación?
El apoderado de José Tomás ha anunciado que el diestro de Galapagar no va a actuar en ninguna de las plazas de los hermanos Óscar y Pablo ‘Chopera’, es decir que la afición de Logroño, como las de Málaga, Almería, Salamanca o San Sebastián (Bilbao y Santander son una incógnita, dado que en éstas sólo ejercen como gerentes), van a quedarse sin ver al torero más esperado. A todas estas ausencias hay que sumar Sevilla, Valencia, Pamplona y previsiblemente Madrid, donde por lo visto ha dado carta blanca a la empresa con la corrida de Victoriano del Río que le habían reservado. Por eso, a estas alturas de la temporada cabe preguntarse dónde va a torear José Tomás y si las plazas que le quedan se corresponden con la categoría de un torero que las últimas dos tardes que estuvo en Madrid, por ejemplo, se entretuvo en cortar siete orejas toreando como un coloso. Las razones que esgrimió Boix el año pasado para no contratarse con estos empresarios las resumió así: «Hemos decidido no tener contacto siquiera con los ‘Chopera’, porque en los últimos tiempos ha existido una gran tensión entre nosotros. Hubo ciertas presiones y no contamos con esas plazas». Obviamente, Boix no explicó en ningún momento los orígenes de las tensiones, pero hay quien apunta a una especie de alianza empresarial para rebajar los honorarios de José Tomás. Sea como fuere, nadie es capaz de hablar claro –Boix le dijo a este periodista que no quería decir nada más– y los aficionados de los principales cosos del orbe taurino resultan los más perjudicados por la ausencia silenciosa de José Tomás de los grandes eventos de la temporada. Lo cierto es que cada día resulta más complicado entender la estrategia de José Tomás y su ruptura del año pasado con Núñez del Cuvillo despertó todas las alertas. ¿Existirá algo no revelado para explicar su comportamiento huidizo y su absoluta falta de comunicación con el resto del mundo? Muchos aficionados no entienden las razones por las que el torero más grande de la historia permanece siempre sumido en una especie de halo de misterio y oscuridad en tiempos en los que la fiesta necesita su liderazgo. / Este artículo lo he publicado en Diario La Rioja.
