El reportaje sobre Venta de Moncalvillo incide en la cocina de Ignacio Echapresto: «El momento cumbre del ágape llega con el vistoso e inteligente bacalao asado en barro con fritada, plato que recupera para la cocción del pescado la ancestral técnica de los alfareros riojanos que siguen mostrando sus habilidades en los pueblos aldeaños». Pero hay muchos más elogios para la cocina de Ignacio Echapresto: «Del cercano río Najerilla llega la trucha, que se sirve en ensalada con jamón y vinagreta de huevas, mientras algunos bocados cárnicos demuestran la magnitud del hermano cocinero con las elaboraciones clásicas: sensacionales morros de ternera guisado, elegante y contudente steak-tartar, aristocrático lomo de cordero con hongos, miel y romero». Sobre Elena Adell tampoco se repara en elogios: «Quien viera por primera vez a Elena Adell no podría imaginar que esta mujer de ojos azules como el Mediterráneo, piel de sesa y un cabello lacio, cuyas tonalidades van cambiando igual que lo hace el paisaje de su Rioja natal es una de las mejores enólogas de nuestro país». La entrevista, que gira en torno de diferentes derroteros, se detiene en la bajada del consumo de vino en España. ¿Por dónde empezar para cambiar la tendencia»: «Por los jóvenes, empezaría con algo dulce para que el contraste no fuera tan brusco; no se puede pasar de los refrescos y de los zumos al vino», explica la reputada enóloga riojana.
o Este artículo lo he publicado hoy en Diario La Rioja.
