La empresa de la plaza de toros de Logroño, capitaneada por Pablo y Óscar Martínez Labiano, comunicó ayer vía Twitter (exactamente a las 17,51 horas), que había decidido organizar una corrida concurso de ganaderías para celebrar el décimo aniversario de la inauguración del coso de La Ribera. Del cartel sólo ha desvelado las divisas que participarán en este festejo extraordinario: Juan Pedro Domecq, La Quinta, Juan Luis Fraile, Ortigao Costa, Alcurrucén y Fuente Ymbro. Para ilustrar el anuncio, la empresa ha colocado en su web las fotos de los seis toros seleccionados. Será la primera vez que se organice una corrida de estas características en la plaza de La Ribera y habría que remontarse muchos años atrás para recordar la última que se celebró en el viejo coso. Lo sorprendente del anuncio es el camino que ha utilizado: su perfil de Twitter (en el que tiene 759 seguidores), además de las características de los hierros seleccionados, ya que algunos de ellos no suelen ser habituales de este tipo de festejos; de hecho faltan ganaderías como Victorino, Ana Romero, Tomás Prieto de la Cal, Felipe Bartolomé o Adolfo Martín, que se han proclamado vencedores en los últimos concursos celebrados en plazas como Zaragoza o Arles, dos de las grandes clásicas de estas corridas. Destacan entre los toros anunciados los de Juan Luis Fraile, La Quinta y Fuente Ymbro.
Corridas especiales
La corridas concurso se celebran con un reglamento especial en el que se marca en el ruedo la zona donde deberá moverse el picador para citar y ejecutar la suerte de varas, diametralmente opuesta a las salidas de toriles y delimitada por la circunferencia mas próxima a las tablas y dos líneas radiales. El picador de turno, una vez colocado en la zona, se sitúa con el caballo junto a las tablas, de las que saldrá para aproximarse a la raya de la circunferencia más próxima a la barrera, sin rebasarla, y realizar la suerte de varas situándose frente al toro cuando el astado haya sido colocado en suerte. En el ruedo sólo permanecerá el picador de turno, para evitar la intervención accidental del otro picador, que estará preparado para salir inmediatamente al ruedo en caso de ser necesaria su participación en la lidia. El toro deberá quedar colocado para realizar la suerte de varas por fuera de la circunferencia de menor diámetro, situada reglamentariamente a tres metros de la anterior, y para las varas sucesivas se le irá colocando de menor a mayor distancia del picador. Además, se podrá perdonar la vida al toro que por su juego y bravura se estime merecedor del indulto, que se concederá con arreglo a lo que dispone el artículo 83.1 del Reglamento de Espectáculos Taurinos, a petición inicial del ganadero y del público. El presidente de la corrida tendrá para ello en cuenta la opinión de un jurado que se supone que se nombrará para tal efecto.
Los toros
Abrirá la corrida la divisa de mayor antigüedad, en este caso la de Juan Pedro Domecq. En segundo lugar aparecerá un astado de La Quinta, un hierro de puro origen Buendía que ya lidió una novillada en La Ribera hace unas temporadas. El tercer competidor será un pupilo de Juan Luis Fraile, también santacolomeño pero por la línea Graciliano, una rareza inhabitual en los encastes. Después aparecerán un cornúpeta portugués de Ortigao Costa (puro Torreón; es decir, Juan Pedro Domecq), otro de Alcurucén, de los Hermanos Lozano (en representación del encaste Núñez) y para rematar la tarde un astado de Fuente Ymbro, de procedencia Jandilla, una ganadería que se ha llevado los premios de San Fermín y que también ha ganado la concurso de Zaragoza en varias ocasiones.
o Este artículo lo he publicado hoy en Diario La Rioja.
