El Juli está imparable; parece que para él todos los toros son propicios para el triunfo, pero la realidad es que se ha convertido en un lidiador de primera magnitud, Un torero técnicamente perfecto y sutil que es capaz de ofrecer a los morlacos todo lo que piden en cada uno de los momentos de la lidia. La verdad es que su superioridad es insultante. Como todo está lleno de alabanzas -a las que me sumo sin ninún problema- me gustaría que no se retorciera tanto toreando en redondo y que al natural torease un poquito menos en la línea. Ah, no me gusta nada su forma de entrar a matar, ni por el salto con el que ha cogido su peculiar tranquillo, ni por lo descarado de su forma de salirse de la suerte. El Juli con el capote está alcanzando una dimensión desconocida. La réplica a Cayetano fue brutal por barroca y rota
Con respecto a la corrida de Garcigrande he decir que no me gustó su nimiedad, su falta de remate y de cuajo, hubo animales que estaban muy por debajo de lo que se debe exigir en Sevilla, mucho culopollo y caritas demasiado inofensivas. La corrida, mansita, pero dejándose toda ella.
Ponce anda fuera de sí y me da la sensación de que se arrastra. El primero de su lote fue muy irregular, pero en el cuarto se borró de la plaza el de Chiva. Siempre he pensado que lo peor de Ponce es el poncismo. Muy mal Enrique y fatal los del Plus tapando el sol con un dedo.
Lo de Cayetano supera lo insuperable. Dos fracasos en dos toros por una clara incapacidad suya para torear. No sabe y tampoco tiene valor ni arrestos para fajarse. Técnicamente es una calamidad y cada día está más visto. Los del Plus también taparon lo suyo aunque Emilio Muñoz se cebó con su falta de ajuste y colocación.
En cuanto a la polémica de si la Puerta del Príncipe era merecida, en todo caso diré que para mí la segunda oreja del primer toro ha sido un punto exagerada, pero no me importa. La seriedad de la plaza está básicamente en el toro que se lidia, y lo de ayer fue bastante lamentable en este aspecto.