Tras pasar los toros a Cultura, RTVE los destierra de su parrilla, la COPE suprime ‘El Albero’ y Zapatero dice que él no los hubiera prohibido en Cataluña
La televisión pública elimina la emisión de corridas y el sector taurino permanece inmóvil tras pasar hace unos meses a Cultura
La fiesta de los toros atraviesa uno de los momentos más críticos de su historia mientras el sector profesional parece impasible ante todo el acoso normativo e informativo que viene sufriendo desde que el Parlament de Cataluña decidiera su abolición en julio de cara a la próxima temporada. Al finalizar el año taurino, diversos matadores –las principales figuras, excepto José Tomás– realizaron una ronda de contactos con varios ministros y líderes políticos que se sustanció en una rueda de prensa en la que se anunció, con Rubalcaba en el papel de gran conseguidor, el pase a Cultura de la corridas de toros. A partir de ahí, nada más que una fallida reunión de la Mesa del Toro de la que nunca más se supo y el abismo... Los toros están ahora reconocidos como Cultura por el actual Gobierno y RTVE, la tele pública que se financia exclusivamente a través de los impuestos ciudadanos, acaba de sacar a la luz una especie de manual de estilo en el que incluye a la fiesta en el capítulo de ‘Cuestiones sensibles’ junto con otras materias tales como el terrorismo, violencia contra las mujeres, el racismo y la xenofobia o las drogas. El apartado se denomina ‘Violencia con animales’ y dice así: «RTVE no es indiferente a la relevancia que tiene el mundo de la tauromaquia ni a su influencia en muchos aspectos socio-culturales. Por ello debe reflejar su actualidad en la programación, destinando para ello programas específicos en TVE y RNE y facilitando el seguimiento en la programación de aspectos artísticos, literarios, medioambientales y sociales relacionados con el toro de lidia y la tauromaquia… No emitirá corridas de toros por su horario, generalmente coincidente con el horario protegido o de especial protección para la infancia». Es decir, una de cal y otra de arena: por un lado reconoce la importancia social del fenómeno taurino (el segundo con más espectadores en España) pero lo despide de un plumazo con un argumento tan débil como inconsistente: el horario infantil. Es decir, el mismo mecanismo expuesto por José Luis Rodríguez Zapatero en la entrevista que concedió hace unos días a Carlos Herrera: «Yo habría votado no a la prohibición de la fiesta de los toros en Cataluña», dijo el presidente de un gobierno que no ha emitido una corrida en abierto desde 2006. Ante esto, los toreros ni la Mesa del Toro han realizado comunicado alguno; al igual que ha sucedido cuando la cadena episcopal, COPE, ha eliminado de su programación uno de sus espacios más veteranos ‘El Albero’, a pesar de su buena cuota de audiencia contando con el handicap del terrible horario de su emisión (la madrugada del domingo al lunes de 1.00 a 3.00 horas). El presidente de la Mesa del Toro, Carlos Núñez, ha manifestado su estupor: «No entendemos el doble juego del Gobierno, que defiende las corridas de toros y su traspaso a Cultura al tiempo que la televisión pública no concede desde hace casi un año ninguna noticia taurina relevante en sus informativos». Además, Núñez denuncia que hasta unos meses la Mesa del Toro y RTVE mantenían conversaciones para que la televisión difundiera «de forma constante, veraz y objetiva» informaciones del mundo taurino, e incluso se plantearon en dichas reuniones colaboración entre ambas entidades para «producir programas sobre la cultura de los toros».
o Este artículo lo he publicado hoy en Diario La Rioja.