El intelectual francés Claude Lanzmann, famoso por su imponente documental de nueve horas sobre el Holocausto ('Shoah'), declaró hoy que no entiende "a los catalanes y su abolición de los toros", en referencia a la prohibición aprobada en julio por el Parlamento catalán. "Es un error absoluto". Lanzmann se encuentra en Madrid para presentar 'La liebre de la Patagonia'(Seix Barral), un compendio de sus memorias que llega a las librerías en español después de un notable éxito de ventas en Francia. El autor, que dirige todavía hoy la emblemática revista 'Les Temps Modernes', fundada por Jean-Paul Sartre, contó que descubrió las corridas de toros cuando viajó por primera vez a España, acompañado de la que fue su amante, Simone de Beauvoir. "Para mí, España fue un gran descubrimiento, el paisaje español, el cielo, los toros". Y todo aquello en pleno franquismo, un momento en el que para un intelectual de izquierdas no era "políticamente correcto" venir a España. En un acto en la Casa Sefarad-Israel, Lanzmann se ha reclamado este miércoles como "un mal judío" y un "actor del siglo XX". Eso sí, ha rechazado la idea de que este libro sea una biografía y ha lamentado que su editor lo haya "encuadrado en el género de las memorias". Claude Lanzmann nació en París el 27 de noviembre de 1925 en el seno de una familia originaria de la Europa del Este. Fue miembro de la Resistencia francesa en Clemont-Ferrand y posteriormente con los maquis de Auvergne. Vivió sin contradicción su lucha anticolonialista y la defensa del Estado de Israel. En 1960 firmó con otros intelectuales el Manifiesto de los 121, que denunciaba la represión en Argelia por parte del ejército francés y declaraba el derecho a la insumisión. A partir de 1970 se dedica principalmente al cine. Sobre este nuevo libro, Lanzmann ha asegurado que "no son los recuerdos de un señor con corbata detrás de una mesa" -en referencia a sí mismo y su atuendo en la rueda de prensa-, y ha defendido que la historia está relatada "con todo detalle pero si notas, sino basado en la memoria". Acerca de su relación con Sartre y Beauvoir, ha destacado que con ellos aprendió "el mundo" y le enseñaron "a pensar". "Sartre era muy inteligente y generoso".
o Vía: La Vanguardia