martes, 11 de mayo de 2010
MORANTE DE LA FRONTERA
Morante de la Puebla en Jerez de la Frontera, torero en la frontera límite de la perfección y del sentimiento. Faenón excelso, de insolente torería surcada por todas las armonías. Morante en su estado puro de levitación. Morante rayando el infinito, hasta el extremo, bordando un toreo que no se puede explicar nada más que viéndolo, un toreo insumiso, rebelde, creativo, a veces jovial, pero rotundo de perfiles, de exquisita trama, de intrincadísima pero a la vez luminosa urdimbre. Yo no he visto nada igual a Morante, a su frontera misma, a la excelsitud de su figura rota, de su figura alada que parece caminar sin duelo en un alambre que no se ve pero que te rompe, por dentro y por fuera también.