Vuelve Miguel Poveda a Logroño tras siete años de ausencia con el propósito de dar comienzo de forma exitosa a una nueva edición de los Jueves Flamencos, que en esta ocasión inician su andadura en la sala grande reservando el coqueto Salón de Columnas para el resto de los conciertos. Y es curioso, porque va a ser la primera vez que el cantaor catalán, tras cuatro actuaciones anteriores en la vieja sala Rex -la primera de ellas en Actual de 1994-, abandone este espacio para ofrecer un recital en nuestra ciudad. Miguel Poveda (Badalona, 1973) viene en un momento espectacular en una carrera repleta de satisfacciones: «He cambiado mucho desde que actué por vez primera en Logroño; tenía apenas veinte años y estaba casi naciendo como artista. Lo que pasa es que he ido evolucionando de forma natural sin una búsqueda premeditada de uno u otro concepto. He realizado muchos trabajos dentro y fuera del flamenco con total naturalidad intentando disfrutar al máximo de cada concierto, de cada grabación, de cada momento».
Regreso al flamenco
Miguel Poveda publicó hace dos años Tierra de Calma, que presentó de forma exitosa en la Bienal de Sevilla y en el que merced a la colaboración con el guitarrista onubense Juan Carlos Romero ha logrado plasmar un disco elegante y pleno de matices donde asombra la sutileza y el poderío de un cantaor en plenitud, de un artista flamenco universal: «Este trabajo supone una vuelta clara hacia el flamenco tras dos trabajos como fueron Desglaç (2005) y Poemas del exilio de Rafael Alberti (2004), en los que busqué otros registros». En este sentido, Poveda destaca el trabajo y las referencias logradas con Juan Carlos Romero: «Es un amante del flamenco, un estudioso que rebusca en lo más clásico para dotar a cada cante de un acento muy especial; hay malagueñas, siguiriya y cabal, toná, e incluso cercanías a la copla. El disco tiene un marcado acento sevillano, ciudad donde reside desde hace unos años el cantaor, y sobresale en el catálogo de canciones unas preciosas bulerías tituladas Alfileres de colores: «Las descubrí en Arena, un espectáculo que hacían juntos Diego Carrasco e Israel Galván. Y lo cierto es que están teniendo una aceptación maravillosa; además es un lujo contar con la colaboración de artistas como Moraíto a la guitarra que le imprime un compás muy especial». Para el concierto de esta noche, al que Miguel Poveda califica como un recital de cante clásico, el artista vendrá acompañado por la guitarra de 'Chicuelo', que actuó el pasado 30 de diciembre con Duquende en el Palacio de los Deportes en la previa de Actual.
o El talento y el riesgo de un artista vital. Dice Miguel Poveda que su evolución como artista no constituye una búsqueda. Sin embargo, de su personalidad y de su talento creativo han surgido un elevado número de senderos nuevos y de perfiles llamativos y extraordinariamente poderosos, donde el riesgo, la creación y el conocimiento de los registros más clásicos han generado la personalidad de uno de los flamencos cruciales para comprender el devenir de los últimos años. Su irrupción en el panorama cantaor fue brutal y los periódicos lo bautizaron casi al momento como el sucesor de Camarón y cosas así. Sin embargo, Poveda ha sido capaz de mandar en su carrera y de generar alrededor suyo la sensación de que sobre él sólo manda Poveda. No se lo pierdan.
o Este artículo lo he publicado hoy en Diario La Rioja.
o El talento y el riesgo de un artista vital. Dice Miguel Poveda que su evolución como artista no constituye una búsqueda. Sin embargo, de su personalidad y de su talento creativo han surgido un elevado número de senderos nuevos y de perfiles llamativos y extraordinariamente poderosos, donde el riesgo, la creación y el conocimiento de los registros más clásicos han generado la personalidad de uno de los flamencos cruciales para comprender el devenir de los últimos años. Su irrupción en el panorama cantaor fue brutal y los periódicos lo bautizaron casi al momento como el sucesor de Camarón y cosas así. Sin embargo, Poveda ha sido capaz de mandar en su carrera y de generar alrededor suyo la sensación de que sobre él sólo manda Poveda. No se lo pierdan.
o Este artículo lo he publicado hoy en Diario La Rioja.