El acuerdo se alcanzó a instancias de la Comunidad de Madrid, que no entendía la ausencia del diestro de la feria de San IsidroJosé Tomás actuará dos tardes en Las Ventas en sendos festejos que no serán emitidos por ninguna televisión, ni en abierto ni en la modalidad de pago por visión. Así reza el último renglón imaginario de la negociación más dura de la historia del toreo para que un matador esté presente en la principal plaza de toros del mundo: Las Ventas, de Madrid.
Y es que ayer, tras más de cuatro horas de negociaciones impulsadas directamente por la Comunidad de Madrid –que no había visto con buenos ojos la ausencia del diestro de Galapagar de la cartelería del abono más importante de la temporada– se presentó en la sala de prensa de Las Ventas Salvador Boix, apoderado de José Tomás y le dijo muy sonriente a una periodista de mundotoro: «Estamos muy contentos. Agradecemos encarecidamente la actitud de la Comunidad y la disposición de la empresa. Se ha alcanzado un acuerdo y en breve daremos más detalles».
Unos minutos después, el empresario del coso madrileño, José Antonio Martínez Uranga, manifestaba su satisfacción tras poner fin a las conversaciones: «Hemos llegado a un acuerdo y hemos solucionado los matices económicos que teníamos. Ahora tenemos que cerrar las ganaderías que toreará, así como las fechas y sus compañeros. Lo que sí es seguro es que será sin televisión». Martínez Uranga aseguraba sentirse «contento por haber podido cerrar a José Tomás en Madrid. Creo que es bueno para todas las partes, para nosotros, para José Tomás y para la afición. Todas los actores teníamos interés en que torease y afortunadamente podrá hacer el paseíllo en Madrid», dijo al portal Burladero.com. José Tomás había llegado antes de la ruptura de las conversaciones del pasado jueves, momento en el que saltaron todas las alarmas, al principio de acuerdo de actuar dos tardes en Las Ventas: una de ellas con televisión. El empresario lo ratificó y dijo que percibiría los honorarios más altos de la historia del toreo.
o Las claves
Ayer: Tras cuatro horas de negociaciones, la empresa de Las Ventas y el apoderado de José Tomás, Salvador Boix, anuncian que el torero de Galapagar actuará dos tardes en Madrid. Las diferencias económicas se han disipado y la negociación se realizó a impulso de la Comunidad de Madrid, propietaria de la plaza.
El jueves: se rompieron las negociaciones. El empresario decía que José Tomás pedía tanto dinero que era imposible contratarlo. El apoderado mantenía, por su parte, que no había tanta diferencia en las negociaciones y que se trataba de un boicot contra el madrileño, que estaba muy disgustado porque su deseo era actuar en Las Ventas a toda costa. En las negociaciones se habló, incluso, de emitir una de esas corridas por TVE y se llegó a decir que ERC se puso en contra.
o Una negociación controvertida llena de rumores, silencios y desmentidos. Un portal de internet lanzó la noticia ayer a las 15.25 horas. Así rezaba su premonitoria especulación: «Jose Tomás toreará los días 5 y 15 de junio en Madrid definitivamente. La Comunidad de Madrid ha impuesto su criterio sobre las negociaciones empresariales y a última hora ha mediado para que el de Galapagar toree en las citadas fechas». Unos minutos después, la noticia desapareció del menú. ¿Qué había pasado? La red se llenó de rumores y de anuncios. Incluso una bitácora francesa recogía la buena nueva: «Mundotoro annonce José Tomás à Madrid». Y después, el silencio de los despachos. Las oficinas de Las Ventas fueron un continuo discurrir de apoderados y empresarios y, también, de emisarios de la Comunidad de Madrid, que no estaba nada de acuerdo con la ausencia del torero más esperado de los carteles venteños. La primera consecuencia de esta última vuelta de tuerca es que todo el engranaje de la feria habrá de ser trastocado y los carteles, que se iban a presentar hoy a las 19,30 horas, saldrán a la luz el próximo viernes. De hecho, las dos corridas que había reseñado José Tomás ya tenían destinatarios a pesar de que uno de los ganaderos no podía entender de dicho cambio de cromos: «La esperanza es lo último que se pierde», manifestó después algún miembro del Consejo. (Artículo publicado hoy en Diario La Rioja).
