El domingo pasado presencié una escena dantesca, relacionada con la plaza de toros de Las Ventas. Se celebraba allí un acto taurino, típico del invierno y una vez terminada la temporada. Los aficionados allí presentes estábamos intranquilos por los rumores que circulan por Madrid -a punto de resolverse el concurso de adjudicación- de otorgar la plaza de Las Ventas a la empresa Taurodelta, la misma empresa implicada en asuntos inmobiliarios, en escándalos, en incumplimientos, y la única de las tres que se presentan que los aficionados no queremos, como así lo hemos hecho constar en repetidas ocasiones. Pues bien, es preocupante e indigno el comportamiento de los señores responsables de la adjudicación de la plaza, señores Gómez y Martín, director del Centro de Asuntos Taurinos y vicepresidente del mismo, respectivamente, mostrando una postura altanera, soberbia y maleducada con los aficionados, enfrentándose incluso a ellos. No solamente no defienden a los aficionados, como es su obligación, sino que nos atacaron con sus actitudes chulescas y despectivas, zarandeos y empujones incluidos. De verdad, lamentable y esperpéntico. ¿Qué tienen estos señores con la empresa actual? ¿Por qué tanta defensa cuándo todos estamos de acuerdo en que han sido nefastos? Señora Esperanza Aguirre, de usted depende. Por favor, haga las cosas bien, que nuestra afición, de verdad, es parte de nuestra vida.Elena Sánchez Quijada. Madrid
Carta al director publicada hoy en Abc que me permito la licencia de colocar en Toroprensa por su interés ante el inminente pucherazo que parece que se avecina.
