Los hasta ahora presidentes de la plazas de toros de Logroño y Calahorra, Miguel Ángel Moreno y Juan José Fernández Ibáñez, han renunciado a su cargo y no se sentarán en el palco de ‘La Ribera’ en la próxima feria de San Mateo. Para sustituirlos, la Consejería de Administraciones Públicas y Política Local, presidida por Alberto Bretón, ha resuelto que sus sustitutos para la próxima feria sean dos presidentes de la plaza de Las Ventas (Madrid), los también funcionarios del Cuerpo Superior de Policía, César Gómez Rodríguez y José Manuel Sánchez.
Los presidentes que han renunciado venían actuando de manera alternativa desde hace siete años. Hasta el año pasado, su nombramiento se efectuaba a principio de temporada y para todos los festejos. Este año, sin embargo, la Consejería de Administraciones Públicas decidió que los nombramientos se hicieran para cada corrida y no con carácter general. Así, el 25 de agosto pasado, se informó a los dos presidentes que habían sido designados para la feria de Calahorra. Miguel Ángel Moreno, que se encontraba de vacaciones, no presidió ninguno de los festejos, labor que recayó íntegramente en Juan José Fernández, quien reconoció a este periódico que «a lo mejor cometí un error aceptando y debía haberme cerrado en banda».
Ayer por la tarde se celebró una reunión, calificada por el propio consejero como «convocatoria un poco extraña», en la que Alberto Bretón y Miguel Sáinz (director general de Política Interior y presidente de la Comisión de Presidencias de la Comisión Consultiva Nacional Taurina) informaron a la empresa de la plaza de toros –representada por Jacinto Yábar de Logroño–, a los diferentes clubes taurinos de La Rioja y a los medios de comunicación, de los acontecimientos que han desembocado en la designación final de los dos presidentes de la plaza de Madrid para la feria de San Mateo. La noticia fue adelantada ayer por TVR y Radio Intereconomía.
Alberto Bretón manifestó que Moreno y Fernández comentaron su intención de no presidir en Calahorra, aunque que al final uno de los dos accedió y se puso como suplente al alcalde, Javier Pagola. Después, fueron convocados a una reunión que se celebró a primeros de septiembre y se «me comunicó que no querían ejercer por motivos personales». Bretón dijo que en dicho encuentro les solicitó «casi a título de favor personal» que presidieran la feria, dada la premura de fechas y la dificultad que se planteaba para designar sustitutos». Ante la negativa de los ya ex-presidentes, Bretón se puso en contacto con la Delegación del Gobierno de Madrid, que fue la que dio los nombres de los dos funcionarios citados.
En el encuentro, se habló de una serie de manifestaciones de los dos dimisionarios en las que se quejaban de «la falta de comunicación entre la Consejería y ellos». Bretón dijo que su despacho «nunca ha estado cerrado a nadie y que como responsable asumo lo mío y lo anterior». En este punto terció Miguel Sáinz, que dijo que desde que el es director general ha mantenido varias reuniones con ellos y que «jamás hemos acudido a comentar nada sobre sus actuaciones en el palco».